domingo, 13 de noviembre de 2011

Tienes que sentir, imaginar, soñar y sobre todo reír...


Imagina que estás en una playa tus pies descalzos notan la brisa del mar y al mismo tiempo la arena húmeda, un golpe de viento desliza tu pelo hacia arriba, el sol te da en la espalda y solo oyes el sonido de las olas, tus ojos se cierran y empiezas soñar, con lo que más te guste o simplemente lo que más ames. La mayoría de veces yo sueño con él, sueño que aparece en ese instante y me coge de la cintura, me tapa los ojos despacio y me besa por el cuello...
Mi sonrisa crece y se despliega hacia arriba... Es una sensación única. Él me susurra al oído y me invita a bañarme con él, yo se lo niego hasta casi sin poder evitarlo me coge del brazo y si, me empuja al mar donde nuestros besos se hacen eternos, parece que el tiempo se a parado y no, no lo hace, se empieza hacer de noche y yo lo contemplo como esa noche tan solo acaba de empezar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario